¿Que más se puede decir cuando nos enfrentamos a una situación kafkiana? eso o muchas derivaciones de frases que hagan alusión a una desesperada forma de resignarse a tal evento; mismo que nos deja sin libertad de elegir lo que uno quiere y nos amarra a lo que las circunstancias reclaman. Aquí mismo me enfrento a la cruda realidad de lo que vive México, día a día miro como nos sumergimos en la asquerosa sonrisa que los altos mandos ponen cuando ven la ignorancia de una nación controlada por el miedo y televisión basura, ¿a poco ustedes creen que los niños de este país son educados correctamente? tenemos unos mediocres indices de educación, nutrición y pobreza; todos los día escucho a alguien quejarse de la economía del país, de la situación, del gobierno, sinceramente, de TODO. ¿Realmente hay pobreza en México? ¿no tenemos los recursos suficientes como para terminar con eso? un lucha que llevamos a duras penas batallando hace ya mas de 70 años. Es irónico proclamar nuestra pobreza cuando tenemos al hombre más rico del mundo, vivimos en un lugar donde las divisas que entran son lo que mantienen a flote la lacha, donde la aspiración de un niño humilde se ha corrompido por las carencias en su familia, al grado que ser parte de algún cartel o alguna otra organización de crimen organizado se ha convertido en un salida de su triste realidad.
Aquí vivimos, en la tierra más caliente del planeta, arde de los casquillos tirados en el suelo, del humo de las pistolas, del fuego que destruye el alma de las personas, del silencio que nos han impuesto... ¿De quién es la culpa? ¿Del gobierno? ¿Del presidente? Quizá sea la corrupción. Para empezar, el gobierno somos nosotros, somos un país democrático y soberano, ¡El pueblo es el que gobierna! los dique personajes políticos son simples representantes de nuestra voz; ahora, ¿el presidente? aquí en México no es mas que otra figura pública, ese titulo se ha degradado tanto que se puede comparar con cualquier cantante pop, ¡hacen caricaturas del presidente en el periódico! ¿Dónde esta la figura de liderazgo? El símbolo que representa toda una NACIÓN, aquel sujeto con carácter, capaz de decidir y poner las cosas en su lugar, tal como alguna vez lo hizo Porfirio Díaz, ¡NO! Ahora se burlan de él en la prensa, en la tele, en las redes sociales, incluso parecieran tener un reallity show, México gasta mas que cualquier país en campañas políticas, tiene uno de los peores crecimientos económicos de toda América latina, ah pero eso sí, nos damos el lujo de subir impuestos, dejar el sector agropecuario en la miseria, no invertir en nuestras plantas petroleras, pues ya saben, por que nos gusta estar vendiendo petróleo crudo y comprarlo mas caro ya procesado, y claro los otros sectores medio cuidarlos y atenderlos, mientras gastamos mas de 100 millones de pesos manteniendo los aviones de los funcionarios públicos, y ni se diga el salario, y aparte las tranzas que se hacen dentro del gobierno.
Pero en fin, a todo esto, la culpa es de nosotros, ¿por qué? bueno, pues porque lo estamos permitiendo. Simplemente por eso, ellos no son los que manejan a México, somos nosotros. Para que un policía te pida una mordida fue porque alguna vez alguien le ofreció dinero a cambio de perdonarle una multa, ahora es toda ya una costumbre, díganme, ¿Cuántas veces, antes de salir de viaje por carretera al D.F. o algún otro lado, contamos el dinero para los viáticos, casetas y pues para la mordida? nosotros propiciamos esa corrupción,
el día que deje de haber demanda dejará de haber oferta y viceversa, así de simple. Nos quejamos de México, sin embargo, México somos nosotros, si no estuviéramos sería nada mas que un pedazo de tierra, un país lo hace su gente, no sus gobernantes, México es su pueblo y sus tradiciones, no sus criminales y sus crímenes, México son tortillas, chile, tequila, tacos y mariachi, mas no marihuana, cocaína narcos y malos gobernantes. Si te quejas de México, te quejas de tí, pues al final, nadie puede cambiar tu entorno, solo nosotros mismos, y para poder terminar con esta problemática hay que empezar a cambiar nosotros, un buen primer paso, sería dejar de ver estupideces en la televisión y comenzar a leer, nutrirse de conocimiento autodidactamente, pues ya vimos que los planes educativos de la Señorita Gordillo, no han servido de mucho, menos chales y más ¡échale! A México solo lo cambiamos nosotros. Yo lo haré.